Un estudio del Milken Institute revela que
un aumento en la participación laboral de las mujeres podría incrementar el
Producto Interno Bruto (PIB) de México en más del 25%, lo que representaría
unos 390,500 millones de dólares. Actualmente, solo el 45.6% de las mujeres
mexicanas en edad de trabajar tienen empleo, frente al 77.5% de los hombres,
según datos del Banco Mundial.
Maggie Switek, directora de la
investigación, señaló que una de las principales razones de esta disparidad es
la falta de acceso a servicios de cuidado infantil. México tiene una de las
“penalizaciones infantiles” más altas del mundo, lo que significa que
la maternidad afecta mucho más la participación laboral de las mujeres que la
de los hombres.
El informe sugiere que la expansión de
servicios de cuidado infantil accesibles y de calidad, como ocurre en países
como Japón, no solo beneficiaría a las mujeres, sino también a la economía
mexicana en su conjunto. Se estima que casi el 65% de las mujeres en México
desean trabajar, y el 78% de los hombres prefieren que sus parejas también
tengan empleo.
Claudia Sheinbaum, presidenta electa, ha
propuesto reactivar los “centros de educación inicial” como una
medida para fomentar la participación laboral femenina. Dado que México tiene
una de las tasas más bajas de participación femenina en América Latina, existe
un gran potencial para impulsar el crecimiento económico si se aprovecha mejor
el talento femenino en el país.