Fundada el 3 de marzo de 1528 por el capitán Diego de Mazariegos, Chiapa de Corzo ha experimentado transformaciones significativas a lo largo de su historia. Un municipio con un pasado rico y complejo que se estableció bajo la autoridad de la Corona Española en 1552.
A lo largo del tiempo, su estatus ha evolucionado, siendo elevada a villa en 1833 y luego a ciudad el 21 de marzo de 1851. En 1888, se le añadió el nombre “de Corzo” en honor a don Ángel Albino Corzo Castillejos, un destacado defensor de la soberanía nacional.
Patrimonio arquitectónico y cultural
Ubicado a orillas del río Grijalva, Chiapa de Corzo es considerado la puerta de acceso al Cañón del Sumidero y ha sido declarado Pueblo Mágico por su notable diversidad cultural y hospitalidad. Entre sus principales monumentos se encuentra el monasterio, edificado en 1548 por frailes dominicos. Este edificio, que funcionó como oficina de gobierno y cárcel durante casi un siglo, actualmente alberga actividades culturales.
La iglesia de Santo Domingo de Guzmán, cuya construcción se inició en 1554 y concluyó en 1572, es otro símbolo importante de la ciudad. Su cercanía a la fuente mudéjar, inaugurada en 1562, resalta la herencia arquitectónica de la región. Adicionalmente, la campana “Santa Teresita”, fundida en 1576, es reconocida como una de las piezas más significativas de la historia chiapaneca.
La iglesia de San Sebastián, construida en 1588, se destaca no solo por su valor arquitectónico, sino también por su papel en la “Gloriosa Batalla por la Independencia” del 21 de octubre de 1865.
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A lo largo de su historia, Chiapa de Corzo ha mostrado un continuo crecimiento en infraestructura, destacando la construcción de los portales en la plaza central en 1827 y el primer kiosco en 1870, donde se interpretó el Himno a Chiapas por primera vez.
En 1956, el puente Dr. Belisario Domínguez se consolidó como una obra clave para la conectividad del municipio, siendo reforzado posteriormente tras los daños sufridos durante los sismos de 1975.
Tradiciones gastronómicas y festividades
Chiapa de Corzo es reconocida por su gastronomía distintiva, que incluye platillos como la pepita con tasajo y el pochitoque enchipotlado. Los mercados y talleres locales ofrecen artesanías que reflejan la maestría de sus artesanos en la creación de piezas de laca y madera tallada.
La Fiesta Grande, celebrada en enero en honor a San Sebastián, es un evento cultural destacado en la región. La danza de los Parachicos, reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, constituye el eje central de esta celebración, donde la comunidad se une en una demostración de identidad y tradición.
Con una historia que se remonta a la civilización zoque, Chiapa de Corzo fue un importante centro comercial precolombino. Hoy, su legado permanece en cada rincón del municipio, desde su arquitectura hasta sus festividades.
